Mario Benedetti fue un escritor, poeta y dramaturgo uruguayo, integrante de la generación del 45. En su poema “Ayer” podemos notar el sufrimiento que nos produce nuestra historia personal, nuestra biografía. El pasado nos roba la libertad, nos espanta y nos reprocha y, en definitiva, nos hace sufrir. Pero el pasado solo puede llegar a nosotros a través de nuestra mente, de nuestro recuerdo. No existe por sí mismo más que en el pensamiento. El pasado palidece ante la vividez y realidad del presente, que podemos oler, sentir, ver, saborear. Es un explosión sensorial real y profunda. Y es en este momento dónde debemos centrar nuestra atención si queremos dejar de sufrir. El mejor remedio ante la tristeza es el vivir y el estar en el mundo real, libre de la prisión de nuestra mente.
Ayer
Ayer pasó el pasado lentamente
con su vacilación definitiva
sabiéndote infeliz y a la deriva
con tus dudas selladas en la frente
ayer pasó el pasado por el puente
y se llevó tu libertad cautiva
cambiando su silencio en carne viva
por tus leves alarmas de inocente
ayer pasó el pasado con su historia
y su deshilachada incertidumbre/
con su huella de espanto y de reproche
fue haciendo del dolor una costumbre
sembrando de fracasos tu memoria
y dejándote a solas con la noche.
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